Extinción del contrato por incumplimiento grave y culpable del empresario
La extinción del contrato por incumplimiento grave y culpable del empresario es un derecho que protege al trabajador cuando el empleador incumple de manera significativa sus obligaciones laborales. En estos casos, el empleado puede solicitar la resolución de la relación laboral con derecho a indemnización y acceso a la prestación por desempleo.
Es importante tener en cuenta que esta decisión no depende únicamente del trabajador, sino que debe ser avalada por un juez tras la presentación de una demanda.
¿Qué dice la ley sobre la extinción del contrato por incumplimiento del empresario?
El artículo 50 del Estatuto de los Trabajadores establece que el empleado puede pedir la extinción de su contrato laboral si existen incumplimientos graves y culpables por parte de la empresa.
Algunos ejemplos habituales son:
- Modificación sustancial de las condiciones de trabajo que afecte la dignidad del trabajador.
- Impago o retrasos continuados en el salario.
- Otros incumplimientos graves, como acoso, falta de ocupación efectiva o negativa de reincorporación tras una modificación injustificada de las condiciones de trabajo.
Incumplimientos graves del empresario que justifican la extinción del contrato
Modificación sustancial de las condiciones de trabajo
Cuando la empresa cambia de forma unilateral condiciones esenciales —como funciones, salario o jornada— sin respetar el procedimiento legal, y ello causa un perjuicio a la dignidad del trabajador, este puede solicitar la extinción del contrato.
Impago de salarios o retrasos continuados
La falta de pago del salario o los retrasos reiterados superiores a 15 días constituyen causa suficiente para reclamar la resolución del contrato. También se considera incumplimiento cuando en un año se dejan de abonar tres mensualidades, aunque no sean consecutivas.
Otros incumplimientos graves
El artículo 50 incluye una cláusula abierta para contemplar más supuestos, como:
- Acoso laboral o sexual por parte del empleador.
- Falta de ocupación efectiva, cuando el trabajador no recibe tareas reales y productivas.
- Negación de reincorporación en los casos en que un juez ha declarado injustificada una modificación de condiciones laborales.
Procedimiento para solicitar la extinción del contrato
El proceso debe seguir unos pasos concretos:
- Presentar una papeleta de conciliación ante el servicio de mediación correspondiente.
- Interponer una demanda en el Juzgado de lo Social si no se alcanza un acuerdo.
- Esperar la resolución judicial, que puede ser:
- Desestimación: el trabajador debe continuar en su puesto.
- Estimación: se extingue el contrato y la empresa debe pagar la indemnización correspondiente.
Durante este proceso, el trabajador debe seguir acudiendo a su puesto de trabajo hasta que haya una sentencia firme.
Indemnización por extinción del contrato por incumplimiento del empresario
Si el juez reconoce la extinción, el trabajador tendrá derecho a la indemnización equivalente al despido improcedente, según su antigüedad:
- Contratos anteriores al 12 de febrero de 2012: 45 días por año trabajado, con un máximo de 42 mensualidades.
- Contratos posteriores al 12 de febrero de 2012: 33 días por año trabajado, con un límite de 24 mensualidades.
Además, el trabajador puede reclamar daños y perjuicios adicionales en casos de acoso o vulneración de derechos fundamentales.
Conclusión: protege tus derechos como trabajador
La extinción del contrato por incumplimiento grave y culpable del empresario es una vía legal para que el trabajador pueda poner fin a la relación laboral en situaciones de abuso, impago o vulneración de derechos.
Para garantizar un proceso correcto y asegurar el cobro de la indemnización, es recomendable contar con la ayuda de un abogado laboralista especializado en reclamaciones contra empresas.