Cuánto cuesta reclamar un accidente laboral
Si quieres saber cuánto cuesta reclamar un accidente laboral has llegado al lugar indicado. En este artículo te explicaremos cuáles son tus derechos al sufrir una de estas contingencias, cómo exigir su efectividad y cuánto te costará el proceso.
Recuerda que un accidente laboral no solo supone el cobro de prestaciones de la Seguridad Social, sino que también incluye la responsabilidad civil de la empresa. Cada una de estas reclamaciones se tramita por separado, aunque generalmente podrá hacerlo el mismo letrado.
Algunos abogados se especializan en accidentes de trabajo y podrán incrementar tanto las prestaciones de la Seguridad Social como la cuantía de la responsabilidad civil de la empresa.
Tus derechos al sufrir un accidente laboral
Los accidentes laborales son aquellos que se sufren con relación al trabajo. Debido a su origen profesional, la Seguridad Social les confiere un régimen especial de protección.
Por ejemplo, no será necesario que el empresario haya cursado el alta para que quedes protegido por el sistema, ya que se aplicará el principio de automaticidad de las prestaciones y el alta de pleno derecho. Tampoco te exigirán un período de carencia, como ocurre con las prestaciones por contingencias comunes.
Por otro lado, las bases reguladoras de las prestaciones serán superiores a las generales. Además, y esto es lo más importante a la hora de calcular tu prestación, podrá aplicarse un recargo si el empresario ha incumplido medidas de seguridad e higiene laboral.
Pero todos estos beneficios dependen de que el accidente se considere laboral. Así que hay que analizar este concepto.
Cuándo se considera que un accidente es de trabajo
El artículo 156 de la Ley General de la Seguridad Social define el accidente de trabajo como una lesión corporal sufrida con ocasión o por consecuencia de la actividad profesional. Dentro del concepto se incluyen algunos supuestos especiales, como:
Los accidentes in itinere, que son los padecidos al ir o volver del trabajo.
Aquellos sufridos durante el desempeño de funciones sindicales.
Los que ocurran durante actos de salvamento o análogos, o durante el ejercicio de la movilidad funcional del empresario o en beneficio de la empresa.
Las enfermedades agravadas o intercurrentes.
En este sentido, resulta poco intuitivo el hecho de que toda aquella enfermedad que se sufra a causa del trabajo y no se encuentre regulada en el cuadro de enfermedades profesionales del RD 1299/2006 también se considerará accidente de trabajo. De hecho, este tipo de enfermedades se conocen como “enfermedades del trabajo” para diferenciarlas de las enfermedades profesionales.
Por último, cabe señalar que hay circunstancias que excluyen la consideración laboral de un accidente:
Se trata de los que deriven de fuerza mayor, o del dolo o imprudencia temeraria del trabajador.
No se incluyen en esta excepción los accidentes debidos a imprudencia laboral o en que concurra responsabilidad civil de terceros.
Las prestaciones de la Seguridad Social
En definitiva, siempre que el accidente pueda considerarse laboral se reforzará la acción protectora de la Seguridad Social. Las prestaciones se calcularán sobre una base reguladora superior.
Además, podrá aplicarse un recargo del 30 % al 50 % extra cuando el accidente se debiera a la inobservancia de medidas de prevención de riesgos laborales por parte del empresario.
Sin embargo, para que se apliquen todos estos beneficios debes conseguir que la contingencia se considere profesional, cosa que no siempre ocurre. En caso de que se declare el origen común del accidente podrás recurrir la resolución administrativa.
Siempre que los accidentes se producen durante el horario laboral y en el lugar de trabajo se presume que son accidentes laborales. Con la ayuda de un abogado especialista en Derecho de Protección Social y gracias a esta presunción será fácil que consigas la declaración del accidente de trabajo y el incremento de las prestaciones.
La responsabilidad civil de la empresa
Al margen de las prestaciones de la Seguridad Social, que son de naturaleza pública, cuando sufres un accidente de trabajo también puedes reclamar la responsabilidad privada de la empresa.
No todos los accidentes laborales implican la responsabilidad civil del empresario. Por tanto, la ayuda de un laboralista te resultará extremadamente útil para exigir una indemnización.
En caso de tener éxito se suele utilizar como guía el baremo de indemnizaciones en accidentes de circulación, regulado en la Ley 35/2015. Este tiene en consideración:
Indemnizaciones diarias por el tiempo que te encuentres en tratamiento. Lo que incluye la rehabilitación una vez reintegrado a tu puesto de trabajo.
Indemnizaciones por daños morales y secuelas permanentes.
En su caso, indemnizaciones por fallecimiento.
Para reclamar la responsabilidad civil del empresario necesitarás la ayuda de un perito médico. Además, si consigues un informe favorable de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social tendrás más garantías de éxito.
Los abogados especializados en este tipo de reclamaciones conocen las mejores estrategias para maximizar tu indemnización. Así que, de nuevo, su asistencia resulta más que recomendable.
Cuánto cuesta reclamar un accidente laboral
Hasta aquí hemos contado qué clases de indemnizaciones puedes exigir tras tu accidente y cómo reclamarlas. Y, como hemos señalado, los letrados especializados en accidentes laborales te brindarán la mejor asistencia en el proceso.
Pero queda una de las cuestiones más importantes, que es la económica: ¿cuánto cuesta reclamar un accidente laboral?
Ya has visto que las reclamaciones se van a producir por dos vías:
La administrativa, que es la relativa a las prestaciones de la Seguridad Social.
Y la civil, que es la relativa a la indemnización de la empresa.
Lo más normal es que ambas reclamaciones se dejen en manos del mismo abogado. Y en estos casos es habitual que el letrado establezca un presupuesto conjunto.
El precio de la reclamación del accidente laboral
Dejando de lado los honorarios del perito médico y el procurador (en aquellos casos en que sean necesarios), los abogados especializados en reclamaciones suelen cobrar un porcentaje de la indemnización a reclamar. Este porcentaje suele oscilar entre el 10 y el 20 % de la cantidad exigida.
También es cierto que algunos abogados cobran una tarifa fija, independiente de la cuantía de la reclamación. Sin embargo, el sistema de cuota litis (cobro proporcional a la indemnización) es el más extendido gracias a sus ventajas:
En primer lugar, el precio siempre será proporcional al éxito de la reclamación. Por tanto, no tendrás que afrontar costosos honorarios si acabas recibiendo una indemnización pequeña.
De hecho, algunos abogados cobran a comisión. Esto implica que no tendrás que pagarles si no ganan el juicio.
Además, al vincularse los honorarios de tu abogado a la cantidad que finalmente cobres conseguirás que tu letrado se comprometa al máximo con tu caso, pues sus honorarios dependerán de tus resultados.
En definitiva, no hay una respuesta unívoca a cuánto cuesta reclamar un accidente laboral, porque los abogados son libres de fijar sus precios. Sin embargo, lo más probable es que consigas una defensa de calidad por una cantidad cercana al 15 % de la cuantía de tu indemnización.