He heredado un piso con mis hermanos y no quieren venderlo
Uno de los elementos más conflictivos en el derecho de sucesiones tiene lugar cuando se hereda un piso entre hermanos y no todos quieren vender. ¿Qué ocurre en estos casos?
Evidentemente, la cuota hereditaria propia no puede quedar secuestrada por los demás herederos. Hoy vamos a analizar la situación para introducir el concepto de la disolución del proindiviso y la solución aportada en el Código Civil.
Un conflicto habitual: heredar un piso entre hermanos y que no quieran vender
Prácticamente la totalidad de las herencias suponen un trámite tenso para la familia. A la hora de repartir el patrimonio suelen renacer rencillas soterradas y reproches. Especialmente en las herencias sin testamento o cuando este se impugna.
Dentro de este momento tormentoso que puede ser la sucesión, existen dos momentos principales:
La aceptación o repudio de la herencia. Los llamados a suceder deberán manifestar si quieren recibir o no la herencia, y en su caso si lo hacen pura y simplemente o a beneficio de inventario. Mediante la aceptación se adquirirá la propiedad sobre la cuota correspondiente.
La partición de la herencia. Se trata de un reparto del haber hereditario conforme a la cuota que corresponda a cada heredero.
Destacamos que se trata de dos etapas porque, cuando los herederos reciben el haber hereditario, lo hacen en comunidad. Esto significa que, aunque a cada uno le corresponda una parte del lote, este debe ser repartido o serán copropietarios.
Determinados bienes, como el dinero, no presentan problemas a la hora de realizar el reparto. Pero otros bienes, como una casa o una obra de arte pueden resultar más conflictivos.
Cada uno de los herederos puede “vender” al resto su cuota, perdiendo el derecho al bien concreto y recibiendo su valor en dinero. Pero, ¿qué ocurre si los hermanos no quieren ceder su cuota ni vender el piso?
La disolución del proindiviso: cómo vender la vivienda familiar heredada
El ejemplo más recurrente de un bien que se hereda y no se quiere vender es la vivienda del causante. Cuando tiene varios hijos y la reciben en herencia caben tres posibilidades:
Que los hermanos procedan a la venta y se repartan el dinero obtenido conforme a la cuota que corresponda a cada cual. Esta es la opción menos conflictiva.
Que uno de los hermanos quiera la vivienda y pague al resto la parte que les corresponde a tenor de su cuota hereditaria. Siempre que haya acuerdo unánime, esta opción tampoco debería despertar conflictos.
Cabe destacar que cuando un heredero trata de vender su cuota a un tercero, el resto pueden adquirirla al mismo precio. Es decir, tienen un derecho de adquisición preferente, que trata de mantener a los extraños fuera del proindiviso.
Que uno de los hermanos (o varios) no quiera vender la vivienda.
Este último caso es el más conflictivo, y es el que ocupa nuestro artículo. Evidentemente, el hermano que se niegue a vender no puede ser obligado a ello.
Sin embargo, el artículo 400 del Código Civil señala que ningún propietario está obligado a permanecer en la comunidad salvo que exista un pacto entre los comuneros. De modo que el resto de hermanos, siempre que no hayan pactado conservar la vivienda indivisa, podrán instar la disolución de la comunidad de bienes.
Ventajas e inconvenientes de la disolución del proindiviso
Para disolver la comunidad de bienes se deberá presentar una demanda en sede civil. Sin embargo, lo más recomendable es negociar previamente la venta. Esto se debe a que si la demanda tiene éxito, la casa saldrá a subasta.
Por tanto, el proceso de disolución del proindiviso:
Tiene la ventaja de levantar los bloqueos que los hermanos puedan hacer a la venta de la vivienda. De hecho, es el único modo permitido legalmente para romper un proindiviso sin la avenencia del resto de copropietarios.
Pero tiene la desventaja de que la enajenación se produce mediante subasta. Esto hace que, en general, el precio recibido sea menor al de mercado, perjudicando a todos los propietarios.
El precio obtenido en la subasta se repartirá entre los hermanos conforme a la cuota hereditaria de cada cual.
Si necesitas disolver un proindiviso o negociar con tus hermanos para vender el piso heredado te recomendamos que contrates a un abogado especialista en sucesiones.