Intereses de demora: Qué son y cómo reclamarlos en 2023
En el ámbito financiero, es importante comprender el concepto de los intereses de demora, también conocidos como intereses moratorios. Estos intereses se refieren a la compensación que debe pagar un deudor a un acreedor por el incumplimiento en el pago de una deuda. Básicamente, son los intereses que el deudor debe abonar debido a su condición de moroso.
Intereses de Demora: Definición y Función
Los intereses de demora, o intereses moratorios, surgen cuando una persona no cumple con el pago de una deuda monetaria. El impago de un préstamo o el retraso en el pago de una deuda siempre tiene consecuencias, y una de ellas es el cobro de intereses adicionales.
La mora o demora ocurre cuando el deudor no realiza el pago en la fecha acordada. Sin embargo, la mora no impide que se realice el pago de manera tardía.
El propósito principal de los intereses de demora es compensar el daño que el deudor causa a su acreedor debido al retraso en el pago de la obligación. Por lo tanto, su naturaleza no es punitiva, sino indemnizatoria.
Requisitos para Aplicar los Intereses de Demora
Para que se apliquen los intereses de demora, deben cumplirse los siguientes requisitos:
- La deuda debe haber vencido, es decir, debe haber pasado la fecha estipulada para realizar el pago.
- La deuda debe ser monetaria, es decir, debe tratarse de una cantidad de dinero adeudada.
- Debe haber un acuerdo expreso que establezca el pago de intereses en caso de incumplimiento.
- No debe existir un pacto contrario al pago de intereses en caso de impago.
Es importante hacer una distinción entre la demora en contratos suscritos entre particulares y la demora en contratos mercantiles o comerciales.
Demora en Contratos entre Particulares
En los contratos celebrados entre particulares, el deudor incurre en mora desde que el acreedor le exige, ya sea de manera judicial o extrajudicial, la entrega de una cosa acordada en la obligación.
Sin embargo, si el contrato establece que no es necesario realizar una reclamación judicial o extrajudicial, la mora comienza desde el momento del incumplimiento.
La regulación de la mora en los contratos entre particulares se encuentra en los artículos 1100 y siguientes del Código Civil.
Demora en Contratos Mercantiles u Operaciones Comerciales
En las operaciones comerciales, no es necesario que el acreedor realice una reclamación expresa o un aviso al deudor. La demora comienza automáticamente una vez que ha transcurrido el plazo de pago establecido.
En este caso, la demora está regulada por la Ley 3/2004, de 29 de diciembre, que establece medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales.
Tipos de Intereses de Demora
Dependiendo de las circunstancias que originen la mora del deudor, se pueden distinguir los siguientes tipos de intereses de demora:
Interés Legal del Dinero
Cuando un deudor se retrasa en el pago de una cantidad de dinero, esto genera un perjuicio económico para el acreedor. La forma de compensar este perjuicio es mediante el pago de intereses.
En la mayoría de los casos, las partes acuerdan el tipo de interés que se pagará por el retraso en el pago. Sin embargo, en ocasiones no se especifica nada al respecto.
Cuando no se ha establecido un tipo de interés para el impago, se aplica el interés legal del dinero.
El interés legal del dinero es el porcentaje legal utilizado para calcular la indemnización por daños y perjuicios cuando el deudor no paga o se retrasa en el pago.
Para el año 2023, el interés legal del dinero es del 3,25%.
Este interés se aplica en los siguientes casos:
- En contratos entre particulares, el interés de demora será el acordado por las partes o, en su defecto, el interés legal del dinero.
- En contratos con sociedades y empresas, el interés de demora será el pactado o, en su ausencia, el interés legal del dinero.
2. Interés de Mora Procesal
A partir del momento en que se dicta una sentencia o resolución que condena al demandado-deudor al pago de una suma de dinero líquida, se devenga a favor del demandante-acreedor un interés anual equivalente al interés legal del dinero incrementado en 2 puntos, o el que establezcan las partes o la ley.
Este tipo de interés de mora procesal se aplica en todos los ámbitos judiciales, excepto en las excepciones establecidas legalmente para las Haciendas Públicas.
Para el año 2023, el interés de mora procesal se fija en un 5,25%.
3. Interés de Demora en Deudas Tributarias y con la Seguridad Social
El interés de demora se refiere al porcentaje que la ley establece y se aplica a las cuotas impagadas en relación con los días de retraso en el pago.
La Ley de Presupuestos Generales del Estado establece anualmente tanto el interés legal del dinero como el interés de demora.
Por lo general, el porcentaje del interés de demora es el interés legal del dinero más un 25%. Sin embargo, en algunos casos, el interés de demora ha superado en más del 25% al interés legal del dinero.
Para el año 2023, el interés de demora es del 4,0625% y se aplica en deudas tributarias y en deudas con la Seguridad Social.
4. Intereses de Demora en Préstamos Hipotecarios, Personales y al Consumo
En el caso de los préstamos hipotecarios para la adquisición de vivienda habitual, garantizados con hipotecas constituidas sobre la misma vivienda, los intereses de demora no pueden ser superiores a tres veces el interés legal del dinero y solo se aplican al capital pendiente de pago.
Para los préstamos personales sin garantía real concertados con consumidores, el Tribunal Supremo considera que el interés de demora es el interés remuneratorio pactado más dos puntos.
El interés remuneratorio es la cantidad que el prestatario debe pagar al prestamista por el uso o disfrute del dinero prestado. Es importante destacar que el interés de demora y el interés remuneratorio son conceptos diferentes. Mientras que el interés remuneratorio es el precio por el préstamo en sí, el interés de demora es una compensación que el deudor debe pagar al acreedor por el incumplimiento de la deuda.
En el caso de los créditos al consumo, la Ley de Contratos de Crédito al Consumo establece que no se puede aplicar un tipo de interés que resulte en una tasa anual equivalente superior a 2,5 veces el interés legal del dinero.
En las operaciones comerciales, el interés de demora está regulado por la Ley de Medidas de Lucha contra la Morosidad en las Operaciones Comerciales. Para el primer semestre del año 2023, el interés de demora aplicable es del 10,50%.
En conclusión, los intereses de demora son una compensación económica que el deudor debe pagar al acreedor por el retraso en el pago de una deuda. Es importante conocer los tipos de interés aplicables según la legislación vigente y los diferentes contratos para reclamarlos correctamente. Si te encuentras en una situación de impago o retraso en el pago de una deuda, es aconsejable buscar asesoramiento legal para conocer tus derechos y opciones de reclamación.
Recuerda que la información proporcionada en este artículo es válida para el año 2023 y puede estar sujeta a cambios en futuras legislaciones.